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Ignait

Ir en contra de la corriente en Marketing

26 febrero, 2024

Si viste el SuperBowl, probablemente te tocó ver el “inusual” comercial de Kanye West. Era un video grabado con su teléfono en el cual decía que se habían gastado todo el presupuesto en pagar por ponerlo al aire así que ya no había presupuesto para producción, pero invitaba a las personas a checar sus productos. Y por más simple que fuera, en redes sociales se habló de este comercial después del partido. La razón es que entre tantos comerciales con gran producción y excelentes guiones, el comercial de Kanye era tan… ¿rudimentario? que quedó grabado en la mente de las personas. 

La marca de Kanye utiliza mucho esta estrategia de hacer algo tan diferente (no siempre bien) que llama la atención. En la era digital, las marcas compiten cada minuto por convencerte de comprar y contratar sus servicios. Cada vez surgen nuevas marcas y lanzan nuevos productos. Es difícil destacar entra tanta competencia, por lo que ir en contra de la corriente, de lo tradicional y de lo recomendado, puede ser tu mejor opción para tener éxito. 

Saturación de ADs y publicidad en comentarios.

Si estás pendiente de nuestras redes, habrás visto nuestras predicciones para marketing en 2024. Una de estas hablaba sobre la publicidad a través de comentarios en Tiktok, Instagram y otras plataformas. Nos hemos dado cuenta que cada vez más marcas comentan como si fueran personas individuales en el contenido de otros, por supuesto viral. Esta es una respuesta natural a que todo está saturado de publicidad y a veces es tan sutil que ni sabemos si estamos viendo un storytime entretenido o la publicidad para la nueva película de Sydney Sweeney. 

Como audiencias y posibles consumidores, cada vez estamos más conscientes de la publicidad que nos muestran y cada vez la rechazamos más. Y es obvio, nosotros entramos a las redes sociales para chismear o reir un rato, no para que nos vendan la nueva mochila de Amazon. Por ello, las marcas tienen que ser más escurridizas con su publicidad. Una nueva estrategia son los comentarios. Por ejemplo, en lugar de pagar a una influencer por hacer un unboxing de ropa, pedirán que haga un Storytime mientras se arregla y se pone un vestido. En lugar de etiquetar a la marca en la descripción, lo harán en los comentarios. De esta forma, la publicidad no se siente como publicidad y las personas sienten que su amiga más íntima les recomendó un vestido. 

De vuelta a lo tradicional

En el mundo de la moda, se dice que estas se reciclan cada 10 años. Lo anticuado se convierte en lo nuevo. Lo mismo pasa en marketing y publicidad. Cuando alguien es innovador y todos empiezan a copiar, lo original será volver a antiguas prácticas. 

Suena más complicado de lo que es. Pongamos el ejemplo del marketing digital. Con la adopción de las redes sociales en la publicidad, utilizarlas era algo innovador. Llegamos a un punto donde tener presencia en redes es esencial, por lo que todos tienen. Pero entonces surge una nueva necesidad por acercarnos a los consumidores de forma tangible y es así como volvemos a prácticas de publicidad tradicional, como la publicidad impresa. Hoy en día, marcas de todo tipo están volviendo a imprimir sus revistas y repartir folletos en las calles. Porque en un mundo donde todos es a través de links en internet o posts en Instagram, esta es una buena forma de aproximarse a su mercado y destacar. 

Abrazar los riesgos al innovar

Parte de ir en contra de la corriente es perder el miedo al fracaso y aceptar que para diferenciarse, hay que tomar ciertos riesgos. Cuando la marca Dove desarrolló sus “Real Beauty Sketches” y sus primeros comerciales desafiando los estándares de belleza, se enfrentaban al posible riesgo de ser rechazados por el mercado. No existía la costumbre de ver a mujeres de todo tipo en los anuncios y fácilmente podrían haber sido criticados o simplemente ignorados. Pero al mercado le gustó, se sintió identificado y se convirtió en consumidores. 

Hoy en día, hacer publicidad sin inclusión y diversidad es una mala idea. Las personas podrían cancelar tu marca en minutos. Pero esto no era lo normal antes. Las marcas que tomaron el riesgo ayudaron a que hoy en día podamos ver un poco más de representación. 

En un entorno de marketing cada vez más competitivo, navegar contra la corriente ofrece a las marcas la oportunidad de destacarse, conectar emocionalmente con su audiencia y fomentar la innovación. Al desafiar las normas establecidas, las marcas pueden abrirse paso en el mercado y ser recordados por sus consumidores. En un mundo donde lo común se olvida rápidamente, el valor de ir contra la corriente puede ser el impulso necesario para alcanzar el éxito. ¿No sabes por dónde empezar? Escríbenos y trabajemos juntos.